Siete técnicas eficaces para inventar cosas nuevas

Siete técnicas eficaces para inventar cosas nuevas
Franz De Paula

Franz De Paula

Creatividad

La invención es el producto más importante del cerebro creativo del hombre.
Nikola Tesla

En 1899, el director de la división de patentes de Estados Unidos sugirió al gobierno la clausura de la oficina, con el argumento de que todo lo que podría inventarse se había inventado ya. Más de un siglo después, ¿qué queda hoy por inventar? Esta pregunta nos deja en blanco, en primer lugar porque estamos atrapados en nuestro tiempo y en segundo porque no podemos saber lo que aún no sabemos, así que su planteamiento es incorrecto. La cuestión no radica en el conocimiento sino en la imaginación: podemos suponer que con el tiempo habrá mejorías y mayor eficiencia en los productos y servicios que conocemos pero, en lo que no conocemos, ¿cuál podrá ser el gran invento del siglo XXI?

La realidad en la que todos estamos contenidos está en constante cambio y las únicas formas en que, evolutivamente, hemos hecho frente a esta naturaleza cambiante han sido la adaptación y nuestra habilidad para modificarla. Aquí es donde la inventiva entra en escena: un invento es la creación o el diseño de una cosa nueva —algo que antes no existía— con el objetivo de hacer la vida humana más sencilla al ahorrar recursos, energía o tiempo. Un invento nos ayuda a adaptarnos y entendernos mejor, a la vez que mejora el mundo.

Celular plegable

Toda gran idea tiene que cubrir tres requisitos: resolver un problema, ser fácil de comprender por su usuario y ser realizable. Ninguna idea es gratuita, sino el resultado de un intenso proceso de ebullición neuronal y de transformación. Aquí empieza tu proceso: de ti depende continuar o abandonarlo; para alentarte, te comparto a siete técnicas sencillas, pero eficaces, para que explores la posibilidad de un invento y eches a andar tu mente imaginativa y curiosa.

1. Adición

Es una de las técnicas más sencillas, pues a diferencia de en la aritmética, en términos creativos una suma tiene múltiples resultados. Muchas de las cosas que nos rodean se crearon así, adicionando o combinando características, funciones o criterios en los objetos. Esto se puede realizar de tres formas:

  1. A+A=B. Se añaden dos o más de lo mismo para crear algo nuevo; por ejemplo, las chamarras de dos vistas o el bolígrafo multicolor.
  2. A+x=C. Se suma el uso o un criterio de una cosa en otra; por ejemplo, un reloj calculadora o un teléfono que es una computadora portátil.
  3. A+B=C. La creación resulta de la adición de dos cosas diferentes; por ejemplo, un tenis y unas ruedas se convierten en patines.

2. Sustracción

Esta técnica es fina porque sintetiza. El principio es sencillo: quitar o restar partes o características hasta dar con algo nuevo. Muchos objetos que nos rodean podrían mejorar con la sustracción y además economizaríamos material. Ejemplos de estas ideas son la cámara digital —se quitó el rollo de película—, el teléfono móvil —se resta el cable del teléfono fijo— y la dona —un pan dulce al que se hace un agujero.

Dona: pan dulce al que se hace un agujero

3. Cambio de apariencia

El diseño es un criterio fundamental en la creación de una idea. Cambiar la apariencia de un objeto significa permitir que prevalezca su esencia, mientras que se transforma su color, forma o proporción. Un ejemplo de esta técnica es la crayola, que es más ancha para adaptarse a las manos de los niños, o los medicamentos infantiles en colores pastel, para que se vean “menos feos”.

4. Cambio de material

En los ámbitos de la ciencia y la tecnología, los expertos se esfuerzan por fabricar materiales y sustancias que resistan el calor y los impactos, que sean opacos o increíblemente transparentes. En ese mismo sentido, una forma de dar con ideas para una invención es sustituir un material convencional por otro. Un par de ejemplos de esta técnica son la cama de agua —un colchón cuyos resortes se reemplazan con líquido— y el vaso de papel, en el que el cristal se sustituyó con un cartón resistente al agua —su inventor, Hugh Moore, ganó mucho dinero con su creación.

5. Cambio de uso

Todos los objetos tienen un uso convencional, al que la gente suele habituarse, pero su uso puede cambiar y aportar una nueva vida al objeto. Ejemplo de ello son el uso de la mezclilla —una tela que originalmente se usaba para tiendas de campaña— en pantalones vaqueros o jeans; o bien, los aviones que se convierten en restaurantes u hoteles. En Costa Rica existe un Boeing 727 reciclado que aún conserva piezas originales de cuando operó por primera vez en 1965; con el fuselaje ahuecado y un interior revestido, fue colocado en lo alto de la jungla para ofrecer una magnífica vista de los árboles y el mar. Así, el juego mental para afilarte en esta técnica es desafiar constantemente el uso de cualquier objeto que observes preguntándote: ¿de qué otra forma se podría usar o qué otra función tiene esta cosa?

6. Cambio de tamaño

Esta técnica consiste en alterar las dimensiones físicas de cualquier objeto, tales como su volumen, peso, altura, longitud o capacidad; un sencillo ejercicio que puede conducir a creaciones interesantes. Algunos ejemplos del resultado de experimentar con el tamaño son las pantallas gigantes, las bicicletas plegables, las laptops y los libros de bolsillo.

Grúa miniatura hecha con 'Lego'

7. Piensa al revés

La técnica del enfoque al revés aborda el pensamiento inverso como una ingeniosa forma de concebir ideas. Consiste en replantear en sentido contrario las características, el funcionamiento, la forma, la dirección o el color de un objeto o proceso para hacerlo más efectivo, cómodo o funcional. Las preguntas que sustentan esta técnica son: ¿qué pasa si A cambia su lugar con B, ¿y si hago todo al revés?, ¿cómo podría hacerse esto de forma opuesta? También es útil “empezar por el final”; por ejemplo, al plantear primero la fecha en que tienes que terminar algo y planear los pasos de adelante hacia atrás.

Inventar es una actividad inherente al ser humano; así que si tienes una idea, ejecútala. Mantén la mente abierta y libre, diviértete con tus errores y no dejes que tus juicios te hagan descartar una buena idea sólo porque es extraña. Sé flexible, nutre tu mente y tu proceso para que el mundo sienta tu efecto y tú sientas el suyo. Tu creación puede mejorar la historia, sólo ocúpate de que mejore tu vida y las de otras personas.

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