La historia secreta de los osos
Llegué al comedor de prisa, me puse a gritar: “¡Los vi, los vi!” Mi madre corrió para ver por qué armaba tanto alboroto, me pidió que me…
Llegué al comedor de prisa, me puse a gritar: “¡Los vi, los vi!” Mi madre corrió para ver por qué armaba tanto alboroto, me pidió que me…